Tiendas de Gamla Stan, una ruta por el diseño sueco

El diseño sueco se ha propagado por todo el mundo y se ha convertido en un valioso objeto de deseo. Sus premisas de funcionalidad con formas sencillas, a la par que estéticas le han dado muy buena reputación. Antes de ir a Estocolmo ya era una apasionada de este estilo. Una vuelta por estas tiendas de Gamla Stan han terminado de hacer el resto. Esta es la selección de las que más nos gustaron.

Tiendas para niños en Gamla Stan

Los niños no querrán irse de Estocolmo sin una Pipi o un gorro de vikingo. Las mamás que adoramos el diseño escandinavo soñamos con ver algún juguete Playsam en su habitación. Para llevarte algo a un precio aceptable, te pueden venir bien estas tiendas. En Gamla Stan nos  llamó la atención, especialmente Kalika, no solo por lo bonita de la tienda sino, por los colores, las formas y los materiales blanditos, además detrás hay un ejemplar proyecto solidario. Kalejdoskop es otra de las tiendas que encaja con nuestra forma de entender los juguetes: ofrecen desde piezas tradicionales como cajas de música o trompos a piezas de jóvenes diseñadores. De las tiendas de ropa para niños nos quedamos con Sewing for Sedds en el que hay desde colección propia a otras marcas escandinavas como Swedish Hasbeens, Skoghall o FUB.

 

Tiendas de Gamla Stan de decoración y regalos

El diseño sueco se deja sentir en todos los ámbitos de la vida y en los muebles y decoración para el hogar es una pasada. Österlåggatan es una de las calles de Gamla Stan en las que perdimos el sentido con la cantidad de tiendas chulas, chulísimas dedicadas a la decoración. Ilustraciones, cojines con estampados nórdicos adorables, lámparas con formas de animales, girnaldas de luces con las que acostumbran a decorar sus ventanas. En fin, todo lo que te puedas imaginar y que además ocupa poco sitio en la maleta. Las que más nos gustaron entre muchísimas repartidas por el entramado de callejuelas de la ciudad vieja.

 

Galerías de arte en medio de muchas tiendas para turistas

Pasear por las calles de Gamla Stan es una auténtica delicia, aunque sea por Västerlånggatan, la más comercial y dedicada en su mayoría a tiendas de souvenirs, heladerías y muchos restaurantes y cafés. También ofrece sorpresas y, en medio de jerseys, guantes y bufandas de punto de pura lana, encuentras los zuecos tradicionales de madera, el souvenir más chulo que nos compramos, (mucho más baratos que en cualquier otra zapatería de la ciudad). Las galerías de arte son otro de los comercios que proliferan por la parte vieja de Estocolmo. Pero para tiendas curiosas y con buen gusto, Lundgrens Fiskredskap especializada en el mundo de la pesca.